Por: María Paola Sierra C.
Primeramente,
establezcamos que los discursos bombardeados en nuestra sociedad, recrean y
manifiestan cosmovisiones, pensamientos,
ideas, posturas e ideologías en todas las esferas habidas. Es por ello que
resulta determinante analizar a fondo, la forma en cómo estos tienden a
formarse y difundirse, el por qué la connotación y denotación que algunos le
dan a ciertas realidades sociales no es la misma a la de otros, para poder
buscar un uso lógico a todo lo que concierne el “Análisis del Discurso”.
A
continuación, tomando como referencia un importante artículo del Dr. Pedro
Santander - Escuela de Periodismo, Pontificia Universidad Católica de
Valparaíso, Chile; estaré dando mi punto de vista frente a este importante
tema.
El
AD es altamente importante para determinar los efectos que el lenguaje y su
particular forma de enviarlo (de acuerdo a cada individuo), tiene un alto
impacto en la Realidad Social, ya que permanentemente los discursos que están
siendo enviados tienen una influencia en la psicología social y las distintas
posturas que terminan por tomar los individuos de determinadas regiones y
culturas.
El
AD se convierte entonces, en esa herramienta importante para medir, analizar y
estudiar a la Sociedad Civil, profundizar en todo lo que se está
tratando/hablando, o cualquier tipo de mensaje emitido y así poder entender
distintos comportamientos en la sociedad tratada.
Ibáñez,
para el año 2003, exponía que el AD ha desplegado una serie de avances, que dan
por resultado la diferenciación notoria entre lo que se conocía como:
-
Mente Vs. Mundo.
En
el cual, los expertos tomaban como unidad de estudio, los pensamientos, la
mente, el subconsciente y todo lo referente a estos factores intangibles, para
dar respuestas a comportamientos y condiciones sociales de distintas culturas y
regiones.
A
lo que hoy conocemos como:
-
Discurso Vs. Mundo.
Donde
lo que se observa en un contexto más amplio, el acto de manifestar ideas,
pensamientos, sentimientos, emociones y todo lo que transitaba por la mente de
los individuos, para que con base a estos discursos manifestados, pudieran
desplegar un análisis profundo de las realidades sociales mostradas.
Freud,
expresaba que el lenguaje manifestaba posiciones del subconsciente, dando a
conocer así las diferentes cosmovisiones del ser humano, mientras que su
discípulo, Reich, manifestaba que no sólo el lenguaje manifestaba ello, puesto
que podía ser manipulado por el emisor en algunas ocasiones, pero, que las
expresiones corporales siempre iban a decir la verdad y a exponer la realidad
de cada individuo.
Ahora,
estos discursos no eran más que codificaciones canalizadas que deberían ser
posteriormente decodificadas y definidas de forma clara y verás, para que
pudieran servir y dar soluciones a las incógnitas o preguntas problemas
previamente establecidas.
Se
procede entonces a desarrollar el Análisis del Discurso, pero antes, debían
respetarse ciertos lineamientos (no formales pero necesarios), los cuales
permitirían un exitoso resultado, se trataba de, plantear un marco de estudio
correspondiente al espacio y cultura pronto a estudiar, dentro de los cuales se
delimitara una naturaleza discursiva para poder aplicar el análisis y plantear
una hipótesis o pregunta problema sobre la cual se encaminara a dar solución el
objeto de estudio.
Durante
mucho tiempo se planteaban distintas preguntas sobre esta herramienta que
propone el AD, buscando que pudiera establecerse una técnica única organizada y
debidamente estructurada, que pudiera ser aplicada por todos los
investigadores, tal cosa no podría existir por muchas razones, a continuación
daré 3 como referentes entre muchas más:
1. Los
objetivos de los distintos análisis, nunca serían iguales, así que en esa
medida, siempre que se practicara un análisis del discurso, se iban a encontrar
variaciones.
2. Los
análisis podían ser subjetivos y llevar consigo distintas variaciones, ya que
los “planteamientos problema”, las hipótesis y las posibles causas eran
subjetivas.
3. Lo
que resultara ser determinante e importante para el primer analista; quizás no
sería importante y determinante para el segundo.
En
su defecto, no existe una técnica única, que nos lleve a desarrollar un
análisis del discurso, lo que sí existen son pautas que plantean los
profesionales en el tema, que muy seguramente terminarán siendo de alto
provecho para los investigadores a la hora de poner en acción un análisis.
Preguntarse
en todo momento ¿Qué busco con esta investigación?, es uno de los pasos
importantes que los expertos recomiendan para un efectivo análisis y que todo
apunte a dar respuesta a la pregunta problema planteada previamente.
En
conclusión, la técnica que implementamos como investigadores para desarrollar
un análisis, cumple un papel importante, pero complementario. Puesto que, como
lo manifesté anteriormente, no existe un único modelo de análisis que se pueda
aplicarse cada vez, mucho menos en los distintos casos, por el contrario,
siempre el análisis del discurso varía según los intereses que motiven la
investigación, según las hipótesis que se propongan al inicio o los objetivos
establecidos.